miércoles, 4 de febrero de 2015

Yo escribiré tu reflejo...



Vienes a mirarte a mis escritos igual que te asomas al espejo por la mañana; sonríes y te dices 'encantado de conocerte, Vanidad'. A mi ego también le parece bien que me leas, cree que te gusta como escribo. Y no se equivoca del todo, pero yo sé que te gusta más tu reflejo. Claro que sí, disfrútalo, nunca antes te habías visto así, con mis ojos.

Siempre me he sentido como ese pedazo de fruta que se le ofrece a un perro, el cual tras olisquearla te mira raro... o como la caricia que se trata de dar a un gato silvestre y este responde con su huida... o como esa pieza hexagonal que un niño trata de meter en un hueco cuadrado... Ahora he dejado de sentirme así, por fin 'el niño' debe de haber encontrado la oquedad correspondiente... Ahora encajo.

Si todo esto es real, amor, me seguirás leyendo mañana. Tú te emocionarás como al principio, y si es real, cuidarás de mí con sumo celo. Yo me dejaré abrazar como hasta ahora toda la noche , y si de verdad es real, cariño, nunca tendré nada que perdonarte. Porque si esto nuestro es así, tan real,  'te quiero' será mi 'buenos días' y amarte, mi 'buenas noches'...

Tú mírate en mis letras, que yo escribiré tu reflejo...

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